Dios, es muy difícil estar desconectado, necesito saber que está ocurriendo y
si alguien le interesa saber de mí, en una ansiedad, es algo sin razón de
ser, ya he hablado con mi familia ellos saben lo acontecido, mis amigos más
inmediatos los veo a diario, en verdad que no hay justificación para tanto drama,
pero necesito conectarme... por eso lo primero que hago hoy es instalar el WhatsApp,
Este chat o red social, es la que más consume mi tiempo, es la herramienta que
me permite comunicarme con el mundo, la descargo y no me traigo mi agenda de
contactos, decido esperar a que las personas me escriban e ir creando una nueva libreta según los seres que me escriba, de esta forma en mi lista solo tendré
personas a las que le intereso, que me tienen registrado y que me escriben con
regularidad, cada mensaje que recibo me tranquiliza y a la vez me genera
angustia y si esa persona especial no me escribe que pasara de mi... mi cabeza
comienza a crear situaciones insistentes y tan inverosímil que me obligan a
preguntarme quien es ese individuo especial del que espero llamada o mensaje, porque
ya mis seres más querido ya se han comunicado conmigo, pero igual sigo
preocupado; sé que no podre reconstruir mi agenda pero qué sentido tiene tener
el teléfono de tantas personas a las que no llamas o escribes o ni siquiera
sabes quienes son o si le interesas... que absurdo es todo, que absurdo soy yo...
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario